Ir al contenido principal

Un giro en el blog

¡Hola! Buen día. Me gustaría hacer un cambio en este blog y no limitarlo a llevar una única voz, quiero decir, la mía. Creo que usar las bondades de este medio para compartir otras experiencias con parálisis cerebral, independientemente del grado y tipo de PC que sea, puede ayudar a muchos a no desesperar, a informar, educar y mostrar los grandes avances que hoy existen con respecto a temas de integración, salud, entre otras.


Hace poco estuve leyendo testimonios de personas con algún tipo de parálisis y creo que la mayoría son muy positivos. Quiero decir, son personas con limitaciones físicas que comparten su día a día y en muchos casos desdramatizan a la PC y nos alientan.

Invito a que este sea un espacio público de construcción sobre el tema, en el que interesados, profesionales de la salud, familiares, amigos y/o por supuesto, aquellos que conviven con una PC, escriban o me envíen experiencias para publicar y sumar otras voces.

Yo voy a seguir escribiendo, por supuesto. Pero, aquellos que quieran sumarse a este blog con una experiencia que consideren enriquece a los lectores, bienvenido. Siempre.


¿Cómo hacerlo?


Bueno, podrían enviarme consultas o lo que se les ocurra y tenga que ver con el tema a victoria@ylarri.com.ar

Y probamos.


Gracias por leer.

Comentarios

  1. Hola Victoria. Nosotros somo Julieta y Fernando, papas primerizos de Bernardo. Llegamos a tu blog, después de un tiempo de resistirnos a leer información en Internet.

    Nuestra historia comienza con una rotura de bolsas y un nacimiento casi instantáneo. El 16 de Marzo entremos a la clínica y el 17 a las 7:40 a.m. Berni ya había nacido, con 32 semanas. Al darse todo tan deprisa las inyecciones para madurar los pulmones no dieron resultado, por esa razón Berni fue derecho a Neo. Estuvo primero con CPAP y luego con respirar artificial. Estuvimos casi un mes en Neo, pasamos por hipertension pulmonar y Neumotorax, lo que implico no poder tocarlo, hablarle, ni estimularlo de ningún modo; sumado a que estaba conectado a un montón de equipos que generan ruidos y alarmas, que a uno le producen taquicardia. Desesperante.

    Obviamente el momento que nos dieron el alta fue, lo mas hermoso que nos paso. A la semana empezamos con controles de peso,ecografias transfontanelares, oftalmologa, otorrinolaringólogo y TO (para evaluar la maduración dada su prematurez). Las ecografias no dieron bien y a su vez la TO comenzó a notar que Bernardo tendía a lateralizar la cabeza, por lo que el pediatra nos derivo con un neurólogo. En principio el neurologo nos dijo que era demasiado pequeño para una resonancia, y lo único que notaba era una hipertonia muscular, y ahí comenzamos con Kinesiologia, no muy contentos con la indiferencia del neurologo, recurrimos a otro. Este nos indico resonancia y electroencefalograma, y fue así como llegamos al diagnostico de parálisis cerebral , esto fue recién hace dos semanas. Leyendo tu historia y los comentarios de todos los padres que participan nos vemos reflejados.

    Como para seguir con el cambio de enfoque que le queres dar al blog. Hoy Berni sonríe, balbucea ( mucho y tipo 6 a.m. ), reconoce a Mama y Papa, logra tomar un juguete si se lo acercas a la mano y llevarlo a la boca, intentan agarrar la mamadera.. y seguiremos jugando y trabajando por mas logros.. Con 7 meses de vida nos enamora día a día.

    Muchas Gracias por compartir sus historias y dar la posibilidad de contar la nuestra. Muy bueno el blog. Continuaremos leyéndolos.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Vivir con leucomalacia periventricular

La verdad, recién empezamos. No tenemos idea de cómo es vivir o, mejor dicho, convivir con la leucomalacia en la mesa familiar. Además, nos parece un término médico horrendo y difícil de comprender. A "leucomalacia" encima se le suma otra palabra más horrenda: Periventricular. Parece una joda. Demasiado complicado hasta para pronunciarlo, pensás, pero después te encontrás memorizando cada sílaba y te volvés vocera n° 1 del término: Leucomalacia periventricular . Al principio lo escribís mal, pero Google te lo encuentra igual y maldecís la exactitud del motor de búsqueda. Descubrís que hay poca información al respecto, que en general se da en bebés extremadamente prematuros o casos mundiales en los que son a término pero lamentablemente sufren algún tipo de falla cardíaca o renal. O, por qué no, en el tuyo. Nosotros Somos papás jóvenes, o eso creemos. No llegamos a los 33 años y hace casi 11 meses que fuimos padres primerizos de un bebé hermoso. Pesó poco y eso nos asustó...

Constanza Orbaiz: "La persona siempre es mucho más que un diagnóstico"

Constanza Orbaiz, psicopedagoga Hace unos días que encontré y se hizo pública y viral esta joyita que acá también comparto. Por joyita me refiero al video que ven a continuación. Se trata de una psicopedagoga con parálisis cerebral que cuenta su historia de vida, cómo convive con su discapacidad, qué hace falta hoy para comprender que la diversidad necesita un espacio en el que todos podamos ser como somos , sin tener que parecernos a nadie, nos lleve el tiempo que lleve, entre otras sentencias que hacen único y moderno a su discurso.  Amé cada palabra de Constanza Orbaiz. La amé, agradecí y celebré haberla encontrado, que viva en Martínez, que sea argentina, que tenga mi edad, que tenga una parálisis cerebral y que, costeando sus dificultades y remando cada desafío que tuvo que afrontar haya podido estudiar, hablar, caminar, recibirse, y lo que es más admirable, trabaje hasta hoy ayudado a otros para que ellos también "puedan", como dice en su conferencia.

Carta a mi hijo mayor, a mi regalo de Dios. A Mateo.

Quiero pedirte perdón por ser tan hincha pelotas a veces. Sí, así como lo leés: hincha pelotas. Me transformaste en una mamá llena de desafíos y felicidades. Gracias Mateo por haberlo hecho. Gracias por confiar en mí, por tu amor, por esa sonrisa maravillosa de todos los días, por los abrazos y los besos con ruido, por esa mirada luminosa que se te enciende cuando llego a casa o te busco en el jardín, o ves llegar a papá.  Te aseguro y perjuro que hago lo mejor que puedo y, creeme, que todos los días pienso en cómo hacerte feliz. Te aseguro también que si pudiera quitarte la lesión motora con la que convivís a diario lo haría sin dudarlo, claro que sí. Pero no puedo, y además muy probablemente no deba hacerlo. Quizás con el tiempo comprendas lo que quiero decir. Todos tenemos un propósito en la vida. Aunque a veces cueste verlo de esa forma. Vivir es muchas veces enfrentarse con situaciones retóricas que por lo general nadie entiende bien del todo por qué ocurren. No todo tie...